miércoles, 30 de septiembre de 2015

Reflexión Primera- La vida y el tiempo ¿Quiénes somos?

Somos trozos de pasado, porque si de algo no podremos librarnos jamás es de quienes somos, un simple resultado del ayer, de la ecuación que significaron nuestras decisiones, nuestra manera de pensar y actuar.-
Solemos los humanos encontrarnos con nosotros mismos en largas noches de insomnio en las que prima una lluvia torrencial de recuerdos, esos de los que no podremos escapar,porque están materializados en los sentidos, ahí en lo más hondo en la música, los olores, en cada imagen que guardamos del ayer que muchas veces no queremos recordar, somos esas cicatrices que cada vez que bajamos la mirada podemos ver en cada paso que damos, aquellas que sangran, las que están cicatrizando y también las que ya cicatrizaron pero siguen doliendo..duelen en ese preciso momento en el que la cabeza y los sentimientos gritan simultáneamente generando una parálisis , ¿como explicarnos haber compartido tanto tiempo de nuestra vida con personas que hoy forman parte de ese pasado? ¿como se le explica a la imaginación, que soberbia nos dice que todo olvidaremos, que en la realidad eso es solo una ilusión? ¿como luchar contra las ilusiones que crecen, si nosotros mismos las dejamos tocar el cielo por la simple mediocridad que significa mentirnos creyendo que todo va a ir mejor, y que esa música o esas fotos perdidas no nos van a doler? . 


Nos engañamos con tanta simpleza, con tan poca piedad hacia nuestra propia persona,sí es verdad que el pasado quedó atrás, pero ... ¿no es eso solo
Lo que nos marca un reloj? O mil relojes?, nada marca el tiempo mejor los amaneceres y los atardeceres, cuantos soles lloraste de decepción, cuantos soles te perdiste por miedo a salir y enfrentar esa luz que quema, pero enseña como ninguna otra cosa en este mundo.
¿Cuantas lunas le debemos a nuestra memoria , a los supuestos, a las hipótesis y a la consciencia? Eso es el tiempo, cada segundo que elevamos los ojos preguntándole algo a alguna estrella, que llama la atención por su fuerte brillo. Como si nuestra vida fuese una canción y cada mirada atrás cambiase el ritmo , cada pregunta marca el compás y cada reflejo es parte de las notas con las que componemos esa gran y majestuosa pieza, que atesoramos porque fue nuestro mejor artilugio para tapar la verdadera canción; esa que forma cada palabra, cada pedacito de dolor si es que el dolor se puede dividir.
caminamos y las calles están llenas de gente que hace lo mismo: porque así funcionamos, oprimidos en una sociedad donde decir "no estoy bien" es el pase libre a la locura, y ¿quien sabe el goce que hay en la locura si se está fuera de ella?. 


La vida útil de la mentira dura hasta que la primer lagrima nos dificulta la visión y nos moja la mejilla, ahí comienza la agonía del 'yo todo poderoso' , y el telón cae hecho un bollo ante nosotros, y en el esta desde la primer hasta la última cosa que nos causa dolor, que nos quita el sueño y a la vez nos hace soñar... esos capítulos de nuestro libro que no cerramos por No haber podido, o no haber querido, peor aún cuando cerramos esos capítulos mal pero no tenemos el valor para ir hasta la hoja donde todo comenzó, nos falta coraje en un mundo donde esta cualidad es lo único que puede salvarnos, pensar, hablarle a Dios o al cosmos, saber pedir perdón y más aún saber perdonar, tal vez si recordáramos el calor de cierto abrazo, el sonido que cierta música nos provoca, o el sabor de ciertos gustos seríamos capaces de hacernos la vida más fácil, y modificar la ecuación de hoy que es finalmente la que mañana nos definirá.